Cuando comenzamos con la temida “vista cansada” y las molestias visuales en cerca, mucha gente se aferra a lo que creen que es la solución más rápida y efectiva, la gafa premontada. Lo que estas personas no saben es que el uso prologando en tareas de cerca con este tipo de “gafas”, ocasiona más problemas que beneficios para la salud de nuestros ojos.
Las gafas premontadas tienen una fabricación industrial estándar, es decir, son gafas que hacen “efecto lupa” con un determinado aumento en ambos ojos por igual. Dichas lentes no llevan ningún tipo de tratamiento protector para el ojo, como puede ser un antireflejante o el nuevo Crizal Prevencia, el cual protege los ojos frente a la incidencia de la luz azul. Este efecto puede producir alteraciones en la acomodación, desequilibrios binoculares, variación en la percepción de las distancias en visión cercana… Al igual, las monturas no tienen en cuenta la morfología del paciente, por lo que el centro óptico de la lente puede no coincidir con la pupila del usuario, creando un efecto de distorsión, incluso de visión doble. Por ello no es aconsejable usarlas como uso continuado para la corrección de la presbicia o vista cansada.
Actualmente no existen deficiencias visuales que puedan ser compensadas de manera generalizada para todo el mundo, ya que cada persona necesita una determinada corrección en cada ojo, al igual que cada uno tenemos unas distancias de trabajo distintas para cada tarea que realicemos.
Debido a esto, es necesaria una adecuada evaluación por parte del óptico-optometrista para detectar el tipo de deficiencia visual que presenta la persona, y buscar el método de compensación que más se adapte a las necesidades de cada paciente.
En Central Óptica podemos aconsejarte sobre cual es la mejor solución a tu problema de cerca. Pásate por cualquiera de nuestros centros y te informaremos.
Y Recuerda, ¡¡¡ UNA LUPA NO ES UNA GAFA !!!
Eva Trillo Naranjo.
Óptico-Optometrista.